Claves para comunicarse: El Sándwich de Hillel

¿Alguna vez has intentado construir una casa sin martillo y sin clavos? Por supuesto que no. No tiene sentido.

Entonces, ¿por qué pensamos que podemos construir relaciones sin herramientas? – Es una locura. ¡Las herramientas de comunicación son el martillo y los clavos de nuestras relaciones!

Con ese espíritu, quiero ofrecerles una herramienta fácil de recordar. Yo la llamo el Sándwich de Hillel para poner fin a los conflictos.

¿Quizás conozcas el Sándwich de Hillel? Es un punto clave de la experiencia del Séder de Pesaj. Es cuando juntamos la matzá, el maror(las hierbas amargas) y el jaroset(la pasta de frutas y nueces) en un sándwich tremendamente simbólico.

Ahora, parte de la genialidad del Seder es que tiene estos alimentos que representan estados psicológicos. La matzá es la humildad, la simplicidad, la autenticidad. También representa lo que es esencial. El maror es la amargura, el sufrimiento. El jarosetes lo dulce y pegajoso. Representa el cemento que mantenía unidos los bloques de construcción egipcios. Es lo que nos permite conectarnos con los demás.

El rabino Hillel llega y dice: «Comelo todo junto». Haz un sándwich. El Sándwich de Hillel.

Así es como vamos a abordar el conflicto. Como un sándwich.

Harry y Sally están en el coche, atrasados (nuevamente) para un compromiso. Harry está conduciendo rápido y furioso por llegar allí. Sally aprieta su cinturón de seguridad y le grita: «¡Maldición Harry, conduces como un loco!». Él se enfurece, se siente criticado y le lanza un comentario despectivo. «¡Por el amor de Dios, mujer, no tendría que conducir como un maniático si no te hubieras tomado una hora para prepararte!».

Ella le echa la culpa, él contraataca. Reina la negatividad.

En un coche cercano, también con retraso para un compromiso, hay otra pareja. Pero en este coche la esposa, a diferencia de Sally, propensa a los conflictos, es una evasora de conflictos. Ella simplemente aprieta el cinturón de seguridad y ahoga su frustración con la conducción de su marido. Ella reprime sus sentimientos y deja que el resentimiento se acumule. Esto se manifiesta de formas mucho más sutiles, como un martirio pasivo agresivo o un colon irritable.

De cualquier manera que lo veas ninguno de los dos casos se trata de un paseo agradable o de una pareja feliz.

Pero ahora imaginemos que las esposas en cambio saben cómo usar el Sándwich de Hillel. Éste es el aspecto que tiene:

Primero la matzá. La matzá es una simple, humilde y genuina declaración de apreciación. ¿Qué es lo que realmente valoras de tu pareja en esta situación (aunque sea un desafío)? ¿Qué es lo esencial aquí?

Sally comienza: «Cariño, puedo ver que te estás esforzando muchísimo para que lleguemos a tiempo. Te lo agradezco».

A continuación, el jaroset: Ella comparte algo dulce, vulnerable y conectado con ella misma. Lo más dulce para el receptor, por cierto, es cuando el que comparte revela su propia vulnerabilidad. Sally lo hace asumiendo su responsabilidad en la situación: «Reconozco que me tomó mucho tiempo prepararme esta mañana y eso nos retrasó. Lo siento. Intentaré ir más rápido la próxima vez».

Este tipo de declaración auto-reveladora crea una dulzura que a él le permite conectarse con ella en vez de rechazarla. Compartir nuestra propia vulnerabilidad primero siempre abre el corazón y los oídos de la otra persona para recibir algún feedback de vulnerabilidad sobre ellos mismos. No es una hazaña fácil, pero sin duda es eficaz.

El maror: Esta es la hierba amarga, la cosa vulnerable del otro: «Me siento súper incómoda con la forma en que conduces. Estaba aterrada cuando pasaste a toda velocidad por ese signo PARE ¿Podrías por favor ir más despacio? Prefiero llegar tarde que muerta».

Este es el maror. No va a querer oírlo. Es amargo. Pero también es la verdad y necesita ser compartida, no sólo reprimida. Es una parte crucial del sándwich. Intenta compartirlo dentro del contexto de tus propios sentimientos. «Me siento incómoda cuando tú X». También compártela dentro del contexto de una petición. «¿Puedes por favor Y?».

Otro trozo de matzá: Finalmente, termina con un último pedazo de positividad: «También querido, aunque es estresante, estoy emocionada de que vayamos a esta reunión juntos. No pasamos mucho tiempo juntos durante el día ¡y estoy feliz de hacer esto contigo!».

Esta es la última parte de la matzá, un simple y humilde pedazo de aprecio que va a lo esencial del momento, el hecho de que estamos juntos y esencialmente felices por eso.

*

Ahora bien, sé que estas fórmulas pueden parecer artificiales, pero sí es posible hablar de esta manera. Sólo se necesita una buena dosis de conciencia, autocontrol y paciencia… además de esta útil herramienta que ofrece un marco para este trabajo.

Dedica un minuto a imaginar tu último conflicto, ya sea con tu pareja/amigo/miembro de la familia.

¿Cómo podría haber sido diferente? ¿Cómo podría haberlos acercado más?

Repite el escenario usando la fórmula del Sándwich de Hillel.

Matzá: Aprecio

Jaroset: Vulnerabilidad sobre sí misma/asumir la responsabilidad que me corresponde.

Maror: Vulnerabilidad del otro. Usa las declaraciones de «Yo siento» y las peticiones específicas de cambios.

Matzá: Aprecio

Pelea una buena pelea. Crea conexión e intimidad hablando durante el conflicto. El conflicto no tiene que arruinar tu relación. Puede que sólo la corrija.

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