Querida Adrienne:
¿Cómo me mantengo firme con mis resoluciones cuando parece que pierdo mi firmeza a la primera tentación? Esto me pasa con todo. Me pasa cuando me propongo a no gritarle a mis hijos, o a no comer comida malsana. Me pasa cuando me propongo a hacer ejercicio; ¡PARECE QUE NO PUEDO CUMPLIR CON NADA!
Regresé a casa de uno de nuestros viajes llena de ideas para mejorar la calidad de mi familia, ¡y ahora, ni siquiera seis meses después, he vuelto a cero!
Querida Cero:
¡NADIE VA DE CERO A HÉROE de la noche a la mañana!
El problema con las «proposiciones» es que rara vez se cumplen (después de todo, todos los años los clubes de salud y los gimnasios venden cientos de nuevas membresías, pero NUNCA necesitan construir nuevos casilleros). Ha sido mi experiencia que el avance lento y constante gana, y es el que finalmente tiene éxito. Ell Rabino Israel Salanter (fundador del Musar Moderno y Movimiento Etico de Mindfulness Judío) dijo:
“Cuando era joven, quería cambiar el mundo. Pero descubrí que era difícil cambiar el mundo, así que traté de cambiar mi país. Cuando descubrí que no podía cambiar al país, comencé a concentrarme en mi ciudad. Descubrí que no podía cambiar la ciudad. A medida que fui creciendo, intenté cambiar a mi familia. Ahora, como anciano, me doy cuenta de que lo único que puedo cambiar es a mí mismo. He llegado a reconocer que si hace mucho tiempo hubiera comenzado conmigo mismo, podría haber tenido un impacto en mi familia. Y mi familia y yo podríamos haber tenido un impacto en nuestra ciudad. ¡Y eso, a su vez, podría haber cambiado al país y todos podríamos haber cambiado el mundo!».
¡Este poderoso mensaje nos resuena tan fuertemente! Necesitas prepararte para el éxito y desarrollar tus músculos espirituales, emocionales y de carácter por medio del trabajo en ti misma y permitir que esos pequeños cambios se manifiesten externamente. Ten en cuenta que cuando una sola persona «cambia el baile», todos los que le rodean se verán afectados. Incluso cuando nadie más está a bordo, tu crecimiento y autocontrol inspirarán y serán ejemplos que ponen en marcha cambios en tu entorno.
Muchas veces, a medida que avanzas para cambiar a los que te rodean, inconscientemente intentamos retroceder para mantenerlo «exactamente como estaba» porque es lo conocido. Incluso si por ejemplo se quejan de tus gritos y chillidos, sospecharán y se sentirán incómodos a medida que cambies tus reacciones. Deberás estar preparada para este «retroceso». Por eso te sugiero que elijas un rasgo en ti que sepas que se interpone en el camino de un hogar más pacífico y del crecimiento personal. ¡Solo uno! Algo manejable. ¡Y una vez que domines eso, habrás desarrollado el músculo para pasar al siguiente y luego al siguiente!
Esto significa que hablamos de una vida entera de trabajo y no termina hasta que damos nuestro último aliento. Pero amiga mía, ¡Este es el propósito de la vida según el pensamiento judío! ¡Refina tu carácter y haz actos de bondad mientras puedas!
¡YO SÉ que podrás hacerlo paso a paso!